26/12/2012 22:15:00
Cuando las lámparas LED detectan la presencia de un peatón, ciclista o vehículo, las luces toman su mayor intensidad, ofreciendo iluminación en todos los ángulos para que los usuarios de la calle puedan sentirse seguros y tener la mayor visibilidad posible.
En algunas vías urbanas supone un riesgo caminar por la noche por la falta de luz, porque muchas ciudades optan por apagar las farolas de las zonas menos transitadas para ahorrar energía. La tecnología ofrece nuevamente una mejor solución. Ya en muchos lugares se instalan luces con detector de presencia, que se iluminan cuando pasa alguien cerca, pero a nadie se le había ocurrido aún aplicar algo similar a las farolas de las calles. La idea procede de la conocida firma Phillips, pero no se trata de encender o apagar la luz cuando pase una persona o vehículo, sino de regular su intensidad. Cuando las lámparas LED detectan la presencia de un peatón, ciclista o vehículo, las luces toman su mayor intensidad, ofreciendo iluminación en todos los ángulos para que los usuarios de la calle puedan sentirse seguros y tener la mayor visibilidad posible. En España ya se ha implantado la tecnología en dos localidades, una de ellas en Madrid y la otra en Navarra.El ahorro energético, que esperan que alcance el 75%, revelará si es viable de extenderse por todo el mundo.
Cuando las lámparas LED detectan la presencia de un peatón, ciclista o vehículo, las luces toman su mayor intensidad, ofreciendo iluminación en todos los ángulos para que los usuarios de la calle puedan sentirse seguros y tener la mayor visibilidad posible.
En algunas vías urbanas supone un riesgo caminar por la noche por la falta de luz, porque muchas ciudades optan por apagar las farolas de las zonas menos transitadas para ahorrar energía. La tecnología ofrece nuevamente una mejor solución. Ya en muchos lugares se instalan luces con detector de presencia, que se iluminan cuando pasa alguien cerca, pero a nadie se le había ocurrido aún aplicar algo similar a las farolas de las calles. La idea procede de la conocida firma Phillips, pero no se trata de encender o apagar la luz cuando pase una persona o vehículo, sino de regular su intensidad. Cuando las lámparas LED detectan la presencia de un peatón, ciclista o vehículo, las luces toman su mayor intensidad, ofreciendo iluminación en todos los ángulos para que los usuarios de la calle puedan sentirse seguros y tener la mayor visibilidad posible. En España ya se ha implantado la tecnología en dos localidades, una de ellas en Madrid y la otra en Navarra.El ahorro energético, que esperan que alcance el 75%, revelará si es viable de extenderse por todo el mundo.