12/04/2013 15:22:00
En Texas, Estados Unidos, ya comenzaron a plantarlos para fertilizar sus suelos y luchar contra la contaminación
Un árbol chino absorbe diez veces más dióxido de carbono que ningún otro árbol y emite también mucho oxígeno, por lo que es perfecto para luchar contra el cambio climático. Así lo piensan en Texas, Estados Unidos, donde decidieron iniciar el proyecto Kiri Revolution, que se basa en plantar un millón de ejemplares para que sus suelos se recuperen de la contaminación. Kiri tiene unas cualidades sorprendentes: crece muy rápido, es capaz de regenerarse cuando se incendia, aguanta perfectamente la contaminación y no necesita un suelo fértil para crecer. Además sus hojas son grandes, que pueden alcanzar los 40 centímetros de ancho y son ricas en nitrógeno, un buen abono. En China se le conoce también como árbol Emperatriz o Paulownia Tormentosa, y puede llegar a ser enorme: con troncos entre 7 y 20 centímetros de diámetro y entre 10 y 25 metros de altura, tamaño que alcanza rapidísimo. Gracias a sus hojas y a sus raíces, que previenen la erosión, logra fertilizar los suelos. Sólo tiene un problema: que no puede crecer con otros árboles altos a su alrededor. Parece que todo son ventajas, porque además sus hojas sirven para hacer té y sus flores atraen a las abejas y fabrican excelente miel.
En Texas, Estados Unidos, ya comenzaron a plantarlos para fertilizar sus suelos y luchar contra la contaminación
Un árbol chino absorbe diez veces más dióxido de carbono que ningún otro árbol y emite también mucho oxígeno, por lo que es perfecto para luchar contra el cambio climático. Así lo piensan en Texas, Estados Unidos, donde decidieron iniciar el proyecto Kiri Revolution, que se basa en plantar un millón de ejemplares para que sus suelos se recuperen de la contaminación. Kiri tiene unas cualidades sorprendentes: crece muy rápido, es capaz de regenerarse cuando se incendia, aguanta perfectamente la contaminación y no necesita un suelo fértil para crecer. Además sus hojas son grandes, que pueden alcanzar los 40 centímetros de ancho y son ricas en nitrógeno, un buen abono. En China se le conoce también como árbol Emperatriz o Paulownia Tormentosa, y puede llegar a ser enorme: con troncos entre 7 y 20 centímetros de diámetro y entre 10 y 25 metros de altura, tamaño que alcanza rapidísimo. Gracias a sus hojas y a sus raíces, que previenen la erosión, logra fertilizar los suelos. Sólo tiene un problema: que no puede crecer con otros árboles altos a su alrededor. Parece que todo son ventajas, porque además sus hojas sirven para hacer té y sus flores atraen a las abejas y fabrican excelente miel.