21/03/2013 20:27:00
El paquete más caro incluye un séquito de falsos amigos que ríen las bromas y no paran de adular a quien los contrate.
El sueño de muchas personas es hacerse famosas y no es nada fácil de conseguir. Sin embargo, en Hollywood cualquiera puede fingir que lo es, contratando el servicio Crowd on Demand, que proporciona paparazzis y fans para que persigan al sujeto que les contrata por todo Beverly Hills, como si fuese toda una estrella. Dependiendo del precio que se pague, la empresa, creada por Adam Swart, ofrece unos u otros servicios. Por ejemplo, hay un paquete completo que tiene un coste de nada menos que US$ 9000 que ofrece a una serie de seguidores que se ríen de las bromas del sujeto, le acompañan a todas partes y no paran de adularle, como si fuesen unos superficiales amigos. En un lugar donde las apariencias son extremadamente importantes, el servicio logró un éxito tremendo, e incluso en muchos casos lograron realmente engañar incluso a la prensa, haciendo creer que los aspirantes a famosos eran más importantes de lo que en verdad son.
El paquete más caro incluye un séquito de falsos amigos que ríen las bromas y no paran de adular a quien los contrate.
El sueño de muchas personas es hacerse famosas y no es nada fácil de conseguir. Sin embargo, en Hollywood cualquiera puede fingir que lo es, contratando el servicio Crowd on Demand, que proporciona paparazzis y fans para que persigan al sujeto que les contrata por todo Beverly Hills, como si fuese toda una estrella. Dependiendo del precio que se pague, la empresa, creada por Adam Swart, ofrece unos u otros servicios. Por ejemplo, hay un paquete completo que tiene un coste de nada menos que US$ 9000 que ofrece a una serie de seguidores que se ríen de las bromas del sujeto, le acompañan a todas partes y no paran de adularle, como si fuesen unos superficiales amigos. En un lugar donde las apariencias son extremadamente importantes, el servicio logró un éxito tremendo, e incluso en muchos casos lograron realmente engañar incluso a la prensa, haciendo creer que los aspirantes a famosos eran más importantes de lo que en verdad son.