13/03/2013 17:10:00
Francisco I, el argentino Jorge Mario Bergoglio, es un detractor de las uniones del mismo sexo las que define como una “pretensión destructiva al plan de Dios”, un crítico del trabajo y la explotación sexual infantil y la pobreza, la que califica como una violación a los derechos humanos.
El recién electo Papa Francisco I, sacerdote argentino jesuita Jorge Mario Bergoglio, es un detractor de las uniones del mismo sexo las que define como una “pretensión destructiva al plan de Dios”, un crítico del trabajo y la explotación sexual infantil y la pobreza, la que califica como una violación a los derechos humanos. Durante su labor como arzobispo de Buenos Aires pronunció una serie de discursos en este sentido. En medio de la discusión del proyecto de ley sobre el matrimonio entre personas del mismo sexo, el Sumo Pontífice envió una carta a la opinión pública en la que manifestó: “No seamos ingenuos: no se trata de una simple lucha política; es la pretensión destructiva al plan de Dios. No se trata de un mero proyecto legislativo (éste es sólo el instrumento) sino de una 'movida' del Padre de la Mentira que pretende confundir y engañar a los hijos de Dios”. En el Día de la Trata de Personas criticó a las autoridades del gobierno de Buenos Aires, porque “la esclavitud no está abolida, en esta ciudad está a la orden el día y bajo diversa forma. En esta ciudad se explota a trabajadores en talleres clandestinos y si son emigrantes se les priva la posibilidad de salir de ahí”. “En esta ciudad hay chicos en situación de calle desde hace años, no sé si más o menos, pero sí hay muchos. Esta ciudad fracasó en librarnos de esa esclavitud estructural”, añadió frente a los asistentes al acto. “Todas las noches veo carritos con cartones tirados por niños de esta ciudad, se raptan a chicos y mujeres y se les somete al uso y abuso de su cuerpo”, criticó. Además, quien fuera arzobispo de Santiago calificó la extrema pobreza como “la violación de un derecho humano a llevar una vida plena (…) Los pobres para los suficientes no cuentan, no tenemos derecho a aguacharnos, a bajar los brazos llevados por la desesperanza, en el rezo por el Bicentenario de la Independencia argentina”. El cardenal Bergoglio también condenó el aborto la que dijo "no es una solución. Debemos escuchar, acompañar y comprender desde nuestro lugar a fin de salvar las dos vidas: respetar al ser humano más pequeño e indefenso, adoptar medidas que pueden preservar su vida, permitir su nacimiento y luego ser creativos en la búsqueda de caminos que lo lleven a su pleno desarrollo". Y criticó a los culpables de la tragedia de Once, al estación de trenes donde ocurrió el fatal choque. "Hay responsables irresponsables que no cumplieron con su deber", manifestó tras la tragedia.
Francisco I, el argentino Jorge Mario Bergoglio, es un detractor de las uniones del mismo sexo las que define como una “pretensión destructiva al plan de Dios”, un crítico del trabajo y la explotación sexual infantil y la pobreza, la que califica como una violación a los derechos humanos.
El recién electo Papa Francisco I, sacerdote argentino jesuita Jorge Mario Bergoglio, es un detractor de las uniones del mismo sexo las que define como una “pretensión destructiva al plan de Dios”, un crítico del trabajo y la explotación sexual infantil y la pobreza, la que califica como una violación a los derechos humanos. Durante su labor como arzobispo de Buenos Aires pronunció una serie de discursos en este sentido. En medio de la discusión del proyecto de ley sobre el matrimonio entre personas del mismo sexo, el Sumo Pontífice envió una carta a la opinión pública en la que manifestó: “No seamos ingenuos: no se trata de una simple lucha política; es la pretensión destructiva al plan de Dios. No se trata de un mero proyecto legislativo (éste es sólo el instrumento) sino de una 'movida' del Padre de la Mentira que pretende confundir y engañar a los hijos de Dios”. En el Día de la Trata de Personas criticó a las autoridades del gobierno de Buenos Aires, porque “la esclavitud no está abolida, en esta ciudad está a la orden el día y bajo diversa forma. En esta ciudad se explota a trabajadores en talleres clandestinos y si son emigrantes se les priva la posibilidad de salir de ahí”. “En esta ciudad hay chicos en situación de calle desde hace años, no sé si más o menos, pero sí hay muchos. Esta ciudad fracasó en librarnos de esa esclavitud estructural”, añadió frente a los asistentes al acto. “Todas las noches veo carritos con cartones tirados por niños de esta ciudad, se raptan a chicos y mujeres y se les somete al uso y abuso de su cuerpo”, criticó. Además, quien fuera arzobispo de Santiago calificó la extrema pobreza como “la violación de un derecho humano a llevar una vida plena (…) Los pobres para los suficientes no cuentan, no tenemos derecho a aguacharnos, a bajar los brazos llevados por la desesperanza, en el rezo por el Bicentenario de la Independencia argentina”. El cardenal Bergoglio también condenó el aborto la que dijo "no es una solución. Debemos escuchar, acompañar y comprender desde nuestro lugar a fin de salvar las dos vidas: respetar al ser humano más pequeño e indefenso, adoptar medidas que pueden preservar su vida, permitir su nacimiento y luego ser creativos en la búsqueda de caminos que lo lleven a su pleno desarrollo". Y criticó a los culpables de la tragedia de Once, al estación de trenes donde ocurrió el fatal choque. "Hay responsables irresponsables que no cumplieron con su deber", manifestó tras la tragedia.