08/03/2013 9:31:00
El ex DT del Barcelona acostumbraba a realizar las prácticas a puertas cerradas, lo que inquietó a los hinchas. Un directivo les dijo que "no tenemos previsto cerrar ni la calle donde está la sede del club".
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La costumbre del Josep Guardiola de entrenar a puertas cerradas inquietó a los hinchas de su futuro equipo, el Bayern Múnich, pero el club los tranquilizó hoy prometiendo que el técnico español también ofrecerá entrenamientos abiertos. "Los hinchas no tienen por qué preocuparse", dijo el presidente del Bayern, Uli Hoeness, al diario "tz" de hoy. "No tenemos previsto cerrar todo ni cercar la calle donde está la sede del club". Hoeness aseguró que la llegada de Guardiola el 1 de junio no alterará "la tradición del Bayern de que los hinchas puedan ver de cerca a sus ídolos". Guardiola adoptó la costumbre de cerrar a los hinchas los entrenamientos con su anterior equipo, el Barcelona. El tema es sensible en Múnich: hace cinco años hubo una protesta de seguidores del equipo cuando se especuló que el entonces nuevo técnico Jürgen Klinsmann haría entrenamientos cerrados.
El ex DT del Barcelona acostumbraba a realizar las prácticas a puertas cerradas, lo que inquietó a los hinchas. Un directivo les dijo que "no tenemos previsto cerrar ni la calle donde está la sede del club".
La costumbre del Josep Guardiola de entrenar a puertas cerradas inquietó a los hinchas de su futuro equipo, el Bayern Múnich, pero el club los tranquilizó hoy prometiendo que el técnico español también ofrecerá entrenamientos abiertos. "Los hinchas no tienen por qué preocuparse", dijo el presidente del Bayern, Uli Hoeness, al diario "tz" de hoy. "No tenemos previsto cerrar todo ni cercar la calle donde está la sede del club". Hoeness aseguró que la llegada de Guardiola el 1 de junio no alterará "la tradición del Bayern de que los hinchas puedan ver de cerca a sus ídolos". Guardiola adoptó la costumbre de cerrar a los hinchas los entrenamientos con su anterior equipo, el Barcelona. El tema es sensible en Múnich: hace cinco años hubo una protesta de seguidores del equipo cuando se especuló que el entonces nuevo técnico Jürgen Klinsmann haría entrenamientos cerrados.