15/02/2013 15:34:00
Los menores de entre seis y 13 años asisten a las escuelas que existen dentro de los hospitales Sótero del Río y Exequiel González, para no perder clases por sus tratamientos. Ahí colorean su rutina marcada una enfermedad que cada año suma 500 nuevos casos. Hoy es el Día Internacional del Cáncer Infantil.
Es una vez a la semana y por 45 minutos. No parece mucho, pero las clases de Arte para los niños con cáncer que se atienden en los hospitales Ezequiel González Cortés y Sótero del Río sirven para colorear una vida marcada por una enfermedad que cada año suma 500 nuevos casos. Son 20 niños de escasos recursos de entre seis y 13 años, que cursan desde primero a octavo básico. Todos siguen las instrucciones del pintor Andrés Vio, quien hace cinco años se sumó al equipo de profesores de las escuelas hospitalarias de la Fundación Nuestros Hijos que se creó para evitar que pierdan clases. Pero como la pintura se convirtió en una terapia, se hizo también el Taller de Arte, inaugurado en el 2011. Fernando Quintana tiene 13 años y es estudiante de la escuela en el González Cortés. Desde el 2011 sufre de un cáncer llamado Rabdomiosarcoma. “El taller es entretenido, ahí aprendí a dibujar bien. Me sirve para despejarme y compartir con mis compañeros”, dijo a Soychile.cl. El pintor a cargo del taller cuenta que “la enfermedad es un momento, una instancia. Lo importante es lo humano. Los niños se interesan harto y llegan con ánimo. El arte sirve como terapia porque se desarrollan las habilidades motrices y como complemento para el tratamiento de sus enfermedades”. “Se desconectan de los exámenes del tedio de la enfermedad y se conectan como algo más lúdico, más creativo donde se crean nuevos mundos”, agregó. Este viernes se conmemora el Día Internacional del Cáncer Infantil, y la Confederación Internacional de Organizaciones de Padres de Niños con Cáncer llamó a centrar la jornada en el diagnóstico oportuno. “El diagnóstico de cáncer en niños, no es sinónimo de muerte. La alerta temprana y el poder acceder a un tratamiento adecuado son claves, permitiendo que el 75% de ellos puedan recuperarse”, aseguró la directora médica de la Fundación, la doctora Marcela Zubieta.
Los menores de entre seis y 13 años asisten a las escuelas que existen dentro de los hospitales Sótero del Río y Exequiel González, para no perder clases por sus tratamientos. Ahí colorean su rutina marcada una enfermedad que cada año suma 500 nuevos casos. Hoy es el Día Internacional del Cáncer Infantil.
Es una vez a la semana y por 45 minutos. No parece mucho, pero las clases de Arte para los niños con cáncer que se atienden en los hospitales Ezequiel González Cortés y Sótero del Río sirven para colorear una vida marcada por una enfermedad que cada año suma 500 nuevos casos. Son 20 niños de escasos recursos de entre seis y 13 años, que cursan desde primero a octavo básico. Todos siguen las instrucciones del pintor Andrés Vio, quien hace cinco años se sumó al equipo de profesores de las escuelas hospitalarias de la Fundación Nuestros Hijos que se creó para evitar que pierdan clases. Pero como la pintura se convirtió en una terapia, se hizo también el Taller de Arte, inaugurado en el 2011. Fernando Quintana tiene 13 años y es estudiante de la escuela en el González Cortés. Desde el 2011 sufre de un cáncer llamado Rabdomiosarcoma. “El taller es entretenido, ahí aprendí a dibujar bien. Me sirve para despejarme y compartir con mis compañeros”, dijo a Soychile.cl. El pintor a cargo del taller cuenta que “la enfermedad es un momento, una instancia. Lo importante es lo humano. Los niños se interesan harto y llegan con ánimo. El arte sirve como terapia porque se desarrollan las habilidades motrices y como complemento para el tratamiento de sus enfermedades”. “Se desconectan de los exámenes del tedio de la enfermedad y se conectan como algo más lúdico, más creativo donde se crean nuevos mundos”, agregó. Este viernes se conmemora el Día Internacional del Cáncer Infantil, y la Confederación Internacional de Organizaciones de Padres de Niños con Cáncer llamó a centrar la jornada en el diagnóstico oportuno. “El diagnóstico de cáncer en niños, no es sinónimo de muerte. La alerta temprana y el poder acceder a un tratamiento adecuado son claves, permitiendo que el 75% de ellos puedan recuperarse”, aseguró la directora médica de la Fundación, la doctora Marcela Zubieta.