28/01/2013 11:51:00
Sin tomar hormonas y sin implantarse silicona, especialmente el izquierdo. Todo se debería al impacto de los fusiles en el pecho. 211 debieron operarse para reducir el busto.
Sin tomar hormonas y sin implantarse silicona, a los soldados alemanes les crecen los pechos, especialmente el izquierdo. Un caso de ginecomastia que dejó muy extrañadas a las autoridades alemanas, tanto que ordenaron que les practicasen un estudio médico completo. Al parecer todo se debía a de los frecuentes impactos de los fusiles contra el pecho durante los entrenamientos, motivo que explicaría también por qué el pectoral izquierdo es el más afectado. Así lo determinó el informe médico que se obtuvo después de un estudio con una duración de seis años sobre una muestra de 211 soldados, todos los que tuvieron que someterse a cirugía para solucionar ese incómodo problema. El estudio comparó a los afectados con otros soldados, y descubrieron que este fenómeno tan solo les sucedía a los integrantes del Wachbataillon, el cuerpo de élite del Ministerio de Defensa de Berlín, que son los que experimentan un entrenamiento más duro. Ahora las autoridades alemanas están tratando de modificar los ejercicios para ofrecer una solución definitiva.
Sin tomar hormonas y sin implantarse silicona, especialmente el izquierdo. Todo se debería al impacto de los fusiles en el pecho. 211 debieron operarse para reducir el busto.
Sin tomar hormonas y sin implantarse silicona, a los soldados alemanes les crecen los pechos, especialmente el izquierdo. Un caso de ginecomastia que dejó muy extrañadas a las autoridades alemanas, tanto que ordenaron que les practicasen un estudio médico completo. Al parecer todo se debía a de los frecuentes impactos de los fusiles contra el pecho durante los entrenamientos, motivo que explicaría también por qué el pectoral izquierdo es el más afectado. Así lo determinó el informe médico que se obtuvo después de un estudio con una duración de seis años sobre una muestra de 211 soldados, todos los que tuvieron que someterse a cirugía para solucionar ese incómodo problema. El estudio comparó a los afectados con otros soldados, y descubrieron que este fenómeno tan solo les sucedía a los integrantes del Wachbataillon, el cuerpo de élite del Ministerio de Defensa de Berlín, que son los que experimentan un entrenamiento más duro. Ahora las autoridades alemanas están tratando de modificar los ejercicios para ofrecer una solución definitiva.