26/01/2013 8:27:00
Jorge Andrés Luchsinger Mackay criticó el trabajo de inteligencia desarrollado en La Araucanía: "Yo no sabía nada hasta que quemaron la casa. Ahí recién alguien me informó que había amenazas contra la familia".
Jorge Andrés Luchsinger Mackay, hijo del matrimonio que murió hace tres semanas en un ataque incendiario en Vilcún, afirmó que "tarde o temprano esto iba a ocurrir". En declaraciones a La Tercera, el joven -que recibió el llamado de auxilio de su madre Vivian la fatídica noche- sostuvo que "era evidente que nos iban a atacar de nuevo a algunos de los vecinos. En esta fecha especial (aniversario de la muerte de Matías Catrileo) analizamos qué podíamos hacer y la verdad es que concluimos que no podíamos hacer nada. Salvo hacer lo que hicimos, que es avisarnos a todos y tratar de apoyarnos lo más rápido posible". El hombre, de 47 años, también criticó el trabajo de inteligencia desarrollado en la región de La Araucanía: "Yo no sabía nada hasta que quemaron la casa. Ahí recién alguien me informó que había amenazas contra la familia (...) Si lo hubiera sabido, sin duda habría solicitado la protección, a pesar de lo que pensaba mi padre de no querer tener carabineros dentro de la casa", sostuvo. "Lo único que uno ve del trabajo de inteligencia son los resultados y hasta ahora los resultados son negativos", enfatizó.
Jorge Andrés Luchsinger Mackay criticó el trabajo de inteligencia desarrollado en La Araucanía: "Yo no sabía nada hasta que quemaron la casa. Ahí recién alguien me informó que había amenazas contra la familia".
Jorge Andrés Luchsinger Mackay, hijo del matrimonio que murió hace tres semanas en un ataque incendiario en Vilcún, afirmó que "tarde o temprano esto iba a ocurrir". En declaraciones a La Tercera, el joven -que recibió el llamado de auxilio de su madre Vivian la fatídica noche- sostuvo que "era evidente que nos iban a atacar de nuevo a algunos de los vecinos. En esta fecha especial (aniversario de la muerte de Matías Catrileo) analizamos qué podíamos hacer y la verdad es que concluimos que no podíamos hacer nada. Salvo hacer lo que hicimos, que es avisarnos a todos y tratar de apoyarnos lo más rápido posible". El hombre, de 47 años, también criticó el trabajo de inteligencia desarrollado en la región de La Araucanía: "Yo no sabía nada hasta que quemaron la casa. Ahí recién alguien me informó que había amenazas contra la familia (...) Si lo hubiera sabido, sin duda habría solicitado la protección, a pesar de lo que pensaba mi padre de no querer tener carabineros dentro de la casa", sostuvo. "Lo único que uno ve del trabajo de inteligencia son los resultados y hasta ahora los resultados son negativos", enfatizó.