22/01/2013 19:34:00
Cuando pidió ayuda al soporte de Ebay para eliminar la imagen, ya fue demasiado tarde. Tanto la original como las imitaciones se estaban propagando rápidamente a través de Twitter con el hashtag #ebayyellowskaterdress.
![Foto Nota]()
Aimi Jones, una británica de 21 años, quiso vender un vestido amarillo a través de la conocida web de compraventa Eba y logró convertir su anuncio en un viral. Lo que sucedió fue que colgó su vestido en una percha en su armario y no se dio cuenta al tomar la fotografía de que ella misma aparecía reflejada en el espejo del mueble, completamente desnuda de cintura hacia abajo. Sin fijarse en la imagen, la adjuntó a su anuncio y rápidamente se expandió por toda la red, convirtiéndose en un éxito en las redes sociales. Incluso le salieron imitadores, que elaboraron montajes fotográficos con la imagen, imitando su pose. Jones aseguró a The Sun que fue un descuido y no lo hizo a propósito. En cuanto se dio cuenta, retiró la venta del vestido, pero el anuncio todavía podía verse. De hecho, el precio ya había ascendido de 15 libras a 150.000. Cuando pidió ayuda al soporte de Ebay para eliminar la imagen, ya fue demasiado tarde. Tanto la original como las imitaciones se estaban propagando rápidamente a través de Twitter con el hashtag #ebayyellowskaterdress.
Cuando pidió ayuda al soporte de Ebay para eliminar la imagen, ya fue demasiado tarde. Tanto la original como las imitaciones se estaban propagando rápidamente a través de Twitter con el hashtag #ebayyellowskaterdress.
Aimi Jones, una británica de 21 años, quiso vender un vestido amarillo a través de la conocida web de compraventa Eba y logró convertir su anuncio en un viral. Lo que sucedió fue que colgó su vestido en una percha en su armario y no se dio cuenta al tomar la fotografía de que ella misma aparecía reflejada en el espejo del mueble, completamente desnuda de cintura hacia abajo. Sin fijarse en la imagen, la adjuntó a su anuncio y rápidamente se expandió por toda la red, convirtiéndose en un éxito en las redes sociales. Incluso le salieron imitadores, que elaboraron montajes fotográficos con la imagen, imitando su pose. Jones aseguró a The Sun que fue un descuido y no lo hizo a propósito. En cuanto se dio cuenta, retiró la venta del vestido, pero el anuncio todavía podía verse. De hecho, el precio ya había ascendido de 15 libras a 150.000. Cuando pidió ayuda al soporte de Ebay para eliminar la imagen, ya fue demasiado tarde. Tanto la original como las imitaciones se estaban propagando rápidamente a través de Twitter con el hashtag #ebayyellowskaterdress.