06/01/2013 21:41:00
El hombre lo perdió en el asiento de un taxi en Nueva York, y lo recuperó gracias al descuido del ladrón que se adueñó de su telefóno móvil.
Nadav Nirenberg extravió su iphone en el asiento trasero de un taxi en Nueva York, pero gracias a una aplicación y al descuido de quien se adueñó del teléfono, pudo recuperarlo. Nirenberg, tras percatarse de que la persona que tenía el celular se había registrado en un servicio de citas online, inmediatamente se creó una cuenta. Su nombre ficticio era Jennifer Gonzalez, una chica de 24 años. Luego de hablar y convencer al hombre de concertar una cita, este último accedió. El lugar fue el departamento de Nadav Nirenberg. El individuo se presentó horas más tarde con una botella de vino y muy bien vestido. Al golpear la puerta un par de veces, y ansioso de conocer a la mujer del sitio web, el sujeto no hizo más que enfrentarse al dueño del iPhone que había robado. Tras amedrentarlo y amenazarlo con una posible llegada de la policía, el sujeto no hizo más que devolverle el iPhone que había extraviado en el asiento de un taxi. Pero esto no fue todo, Nadav se quedó a demás con 20 dolares, la botella de vino y un perfume que el hombre llevaba.
El hombre lo perdió en el asiento de un taxi en Nueva York, y lo recuperó gracias al descuido del ladrón que se adueñó de su telefóno móvil.
Nadav Nirenberg extravió su iphone en el asiento trasero de un taxi en Nueva York, pero gracias a una aplicación y al descuido de quien se adueñó del teléfono, pudo recuperarlo. Nirenberg, tras percatarse de que la persona que tenía el celular se había registrado en un servicio de citas online, inmediatamente se creó una cuenta. Su nombre ficticio era Jennifer Gonzalez, una chica de 24 años. Luego de hablar y convencer al hombre de concertar una cita, este último accedió. El lugar fue el departamento de Nadav Nirenberg. El individuo se presentó horas más tarde con una botella de vino y muy bien vestido. Al golpear la puerta un par de veces, y ansioso de conocer a la mujer del sitio web, el sujeto no hizo más que enfrentarse al dueño del iPhone que había robado. Tras amedrentarlo y amenazarlo con una posible llegada de la policía, el sujeto no hizo más que devolverle el iPhone que había extraviado en el asiento de un taxi. Pero esto no fue todo, Nadav se quedó a demás con 20 dolares, la botella de vino y un perfume que el hombre llevaba.