31/08/2013 11:39:36
Hewitt, ex número uno del ranking y ahora 66 del escalafón con 32 años, lo venció 6-4, 5-7, 3-6, 7-6 (7-2) y 6-1 en más de cuatro horas de duelo. El argentino le restó importancia a su derrota: "Tampoco es para tanto, es un partido", dijo.
El australiano Lleyton Hewitt dio hoy la gran sorpresa del Abierto de tenis de Estados Unidos al ganar al argentino Juan Martín del Potro en un duelo de locura y avanzó a la tercera ronda junto con el serbio Novak Djokovic y el británico Andy Murray.
Hewitt mostró el tenis que le llevó a ganar dos Grand Slam a comienzos de siglo, abrumó a Del Potro 6-4, 5-7, 3-6, 7-6 (7-2) y 6-1 en más de cuatro horas de duelo, y dejo el cuarto grande de la temporada sin representantes argentinos.
Djokovic, número uno del mundo, y el checo Tomas Berdych fueron los únicos grandes favoritos que vencieron sus partidos en tres sets en una calurosa jornada en Nueva York. Mañana buscarán un lugar en los octavos de final cuatro españoles, entre ellos Rafael Nadal y David Ferrer, el suizo Roger Federer, el francés Richard Gasquet y la gran esperanza local, el gigante John Isner.
En esa ronda ya no estará Del Potro. Sexto favorito y campeón en 2009, el argentino estuvo hoy muy lejos de su mejor nivel -cometió 70 errores no forzados- y se despidió después de cuatro horas y tres minutos de batalla.
Hewitt, ex número uno del ranking y ahora 66 del escalafón con 32 años, forzó al límite a Del Potro con su ordenado tenis en un partido que estuvo a la altura de lo esperado. No en vano, eran dos ex campeones del torneo.
Jugado en el primer turno nocturno en el estadio Arthur Ashe, el partido ofreció al público emociones para todos los gustos: quiebres, passings, dropshots, alternativas continuas y mucho tenis.
"Es increíble, viendo que tenía a Del Potro en la segunda ronda pensé que era una oportunidad para jugar de nuevo en la Arthur Ashe. Me encantó jugar otra vez en esta pista. Hemos dado un buen show", dijo Hewitt, campeón del certamen en 2001, cuando Del Potro era un niño de apenas 12 años.
El argentino restó importancia a su derrota y felicitó a Hewitt por el espectáculo que brindaron al público que colmó la cancha central hasta casi entrada la madrugada.
"Tampoco es para tanto, es un partido. Sabía el rival que tenía delante. A esos jugadores uno los quiere tener siempre lo más lejos posible", dijo Del Potro. "Vale la pena jugar estos partidos. Me voy enojado por la derrota, pero es lindo jugar estas batallas", añadió.
El australiano, número uno del mundo durante 80 semanas y que ganó 28 títulos desde que comenzara a competir en el circuito profesional en 1998 -entre ellos un US Open y un Wimbledon-, se medirá en la siguiente ronda al ruso Evgeny Donskoy, verdugo del alemán Peter Gojowczyk por 6-3, 6-4, 3-6, 4-6 y 6-3.
Finalista en 2012, Djokovic se sobrepuso tras un complicado set inicial para vencer por 7-6 (7-2), 6-2 y 6-2 a Becker y dar un paso más en su intento por retener el número uno del mundo.
"Fue un partido difícil para mí. Becker tiene calidad y mereció ganar el primer set. Después de remontar y ganarlo me sentí más cómodo en la pista", dijo Djokovic, más errático y estático de lo habitual en una jornada calurosa y con leve pero incómodo viento.
"En la primera ronda jugué muy bien, pero hoy me costó. Quiero encontrar el ritmo en la pista. Hoy las condiciones fueron complicadas", dijo el serbio, que perderá el número uno del mundo si cae en la siguiente ronda y Nadal llega a la final o si el español levanta el trofeo y él no juega el partido decisivo.
Djokovic, que alcanzó al menos las semifinales en sus seis últimas participaciones en el US Open, incluyendo tres finales y un título, se medirá por un lugar en octavos de final al portugués Joao Sousa.
Murray, el campeón defensor, se impuso por 7-5, 6-1, 3-6 y 6-1 al argentino Leonardo Mayer, número 81 del ranking mundial, en una cancha Louis Armstrong a rebosar. No había ningún asiento libre en el segundo estadio más grande del complejo.
El británico, que derrotó a Djokovic en la final de 2012 para alzarse con su primer Grand Slam, cedió la tercera manga ante la poderosa y precisa derecha de Mayer, pero terminó imponiendo su tenis después de dos horas y 41 minutos de duelo.
"Fue un partido difícil, corrimos mucho y hacía mucho calor. Los dos sudamos mucho", dijo Murray, que se medirá se medirá en la siguiente ronda al alemán Florian Mayer, verdugo del local Donald Young por 7-5, 6-3 y 6-4.
Berdych, semifinalista en 2012 y número cinco del mundo, ganó por 7-6 (7-3), 7-6 (7-3) y 6-3 al estadounidense Denis Kudla.
El suizo Stanislas Wawrinka, noveno favorito, derrotó en un igualado duelo al croata Ivo Karlovic por 7-5, 7-6 (10-8) y 6-4 y se medirá con el chipriota Marcos Baghdatis, que ganó con facilidad en tres mangas al sudafricano Kevin Anderson.
El español Marcel Granollers logró la remontada del día al vencer al estadounidense Rajeev Ram por 3-6, 4-6, 6-2, 6-3 y 7-5 en una jornada en la que también avanzó de ronda el jugador más veterano del cuadro, el alemán Tommy Haas.
No hubo sorpresas en el cuadro femenino: la número uno del mundo, Serena Williams, derrotó a la kazaja Yaroslava Shvedova por 6-3 y 6-1 en un partido que terminó pasados unos minutos de la una de la madrugada del viernes.
La polaca Agnieszka Radwanska, tercera preclasificada, la china La Ni, quinta favorita, y la estadounidense Sloane Stephens avanzaron hacia unos octavos de final en los que también estará la española Carla Suárez.