Se trata del ex vicejefe del servicio de inteligencia Ahmed al Asiri y Saud al Qahtani, un estrecho asesor del heredero.
Una corte de Estambul emitió hoy órdenes de arresto contra dos altos funcionarios saudíes cercanos al príncipe heredero saudí Mohamed bin Salman, en conexión con el asesinato del periodista disidente Jamal Khashoggi, informó la agencia Anadolu. La información identifica a ambos sospechosos como Ahmed al Asiri, ex vicejefe del servicio de inteligencia, y Saud al Qahtani, un estrecho asesor del príncipe que fue formalmente relevado del puesto en octubre. Khashoggi, un periodista saudí crítico con la Casa Real de su país, fue asesinado dentro del consulado de Arabia Saudí en Estambul el 2 de octubre. El Gobierno de Riad niega que el príncipe Salman haya tenido algo que ver con el crimen. El cadáver de Khashoggi no ha sido encontrado. La oficina de la fiscalía pública de Estambul pidió al tribunal que emita las órdenes de arresto como parte de la investigación por el crimen. El presidente turco, Recep Tayyip Erdogan, presiona al reino petrolero para que revele quiénes fueron los autores del asesinato y argumenta que es un tema que afecta al mundo entero y no sólo a Turquía. Durante su asistencia a la cumbre de los países desarrollados y emergentes del G20 en Argentina el pasado fin de semana, Erdogan dijo que Arabia Saudí debe ser la primera interesada en saber exactamente qué le pasó a Khashoggi, y añadió que Turquía ha compartido las pruebas con las que cuenta con varios países, entre ellos Estados Unidos y Alemania. El martes, dos senadores estadounidenses que acudieron a una reunión informativa sobre el caso con la directora de la Agencia Central de Inteligencia (CIA), Gina Haspel, aseguraron que ya no dudan de que el príncipe heredero es responsable del asesinato. Si Mohamed bin Salman estuviese frente a un jurado, "tendrá un veredicto unánime en 30 minutos. Culpable. Un veredicto de culpabilidad", dijo el senador Bob Corker. Arabia Saudí lleva a cabo su propia investigación y la fiscalía pide la pena de muerte para cinco sospechosos. Su versión es que se llevó a cabo una operación no autorizada y sin conocimiento del príncipe. Erdogan ha pedido en numerosas ocasiones que los detenidos en Arabia Saudí sean extraditados a Turquía. Los dos sospechosos contra los que se libró orden de arresto hoy no se encuentran entre los presos por el caso en el reino del desierto.