21/04/2013 9:56:00
El ex ángel de Victoria's Secret se considera adicta a esta disciplina. "Para que la práctica tenga efectos visibles en tu cuerpo, hay que atreverse con los ejercicios más difíciles", dijo la también esposa del actor Orlando Bloom.
Aunque recientemente anunció que no renovaría su contrato como ángel de la firma de lencería Victoria's Secret, Miranda Kerr, la estrella de las pasarelas, sigue demostrando que, pese a la maternidad, su escultural figura sigue siendo una de las más cotizadas en el mundo de la moda. El secreto de la australiana para mantenerse en forma y seguir luciendo su espectacular silueta en los desfiles reside en la práctica continuada del yoga, una disciplina física y mental a la que considera ser adicta y que normalmente lleva a cabo a través de las posturas más exigentes. "Me encanta ponerme boca abajo y mantener el equilibrio apoyando solo mi cabeza. Esta es una de las posturas más complicadas de las muchas que tiene el yoga, que son precisamente mis favoritas. Para que la práctica del yoga tenga efectos visibles en tu cuerpo, hay que atreverse con los ejercicios más difíciles. Aunque reconozco que, en ese sentido, soy muy afortunada. Siempre he sido una persona muy flexible, lo que debo a haber sido una buena gimnasta durante mi infancia", reveló la modelo a la revista británica ES magazine. A pesar de su obsesión por el ejercicio físico, a la maniquí también le gusta darse un capricho gastronómico de vez en cuando, una afición que encaja perfectamente con los frecuentes asados que organiza su marido, el popular actor Orlando Bloom, con la compañía de sus amigos.
El ex ángel de Victoria's Secret se considera adicta a esta disciplina. "Para que la práctica tenga efectos visibles en tu cuerpo, hay que atreverse con los ejercicios más difíciles", dijo la también esposa del actor Orlando Bloom.
Aunque recientemente anunció que no renovaría su contrato como ángel de la firma de lencería Victoria's Secret, Miranda Kerr, la estrella de las pasarelas, sigue demostrando que, pese a la maternidad, su escultural figura sigue siendo una de las más cotizadas en el mundo de la moda. El secreto de la australiana para mantenerse en forma y seguir luciendo su espectacular silueta en los desfiles reside en la práctica continuada del yoga, una disciplina física y mental a la que considera ser adicta y que normalmente lleva a cabo a través de las posturas más exigentes. "Me encanta ponerme boca abajo y mantener el equilibrio apoyando solo mi cabeza. Esta es una de las posturas más complicadas de las muchas que tiene el yoga, que son precisamente mis favoritas. Para que la práctica del yoga tenga efectos visibles en tu cuerpo, hay que atreverse con los ejercicios más difíciles. Aunque reconozco que, en ese sentido, soy muy afortunada. Siempre he sido una persona muy flexible, lo que debo a haber sido una buena gimnasta durante mi infancia", reveló la modelo a la revista británica ES magazine. A pesar de su obsesión por el ejercicio físico, a la maniquí también le gusta darse un capricho gastronómico de vez en cuando, una afición que encaja perfectamente con los frecuentes asados que organiza su marido, el popular actor Orlando Bloom, con la compañía de sus amigos.