17/12/2015 13:15:59
"Que me perdonen, de todo corazón, por el malestar causado. Si pudiera retroceder el tiempo lo haría. Estoy muy arrepentida", dijo hoy Patricia Montero en Mega.
Patricia Montero, la mujer que
llamó a Carabineros para constatar que un
auto a pedales conducido por una niña de cuatro años la había atropellado hiriéndola en el tobillo en
Maipú, pidió disculpas por su actuar hoy en el matinal "
Mucho Gusto" de Mega.
"No tengo que hacer descargos, solamente pedir disculpas a la señora, y a su hermosa bebé.
Que me perdonen, de todo corazón, por el malestar causado. Si pudiera retroceder el tiempo lo haría (...) No sé qué hacer para reparar este gran daño que he hecho. Estoy muy arrepentida, por mi, por nosotras, pero sobre todo por la niña, y por la madre (...) no me voy a cansar de pedirles perdón”, dijo.
Patricia, que estaba junto a
su hermana Silvana en el despacho, incluso les deseó feliz Navidad a las afectadas y dijo que "encantada" se juntaría con Alejandra Lagos, la madre de la niña acusada y quien
viralizó la inédita situación.
"Todo se fue de las manos",
se lamentó Silvana, que en una nota anterior del canal, explicó que el único objetivo de haber denunciado el hecho fue tener una constancia para un seguro y pedir que se demarque la zona donde circulan los niños en los carritos.
Todo el panel de "Mucho Gusto" valoró la acción de las hermanas. “Estando en la previa de la Navidad, este acto resulta maravilloso. Muy valioso”, dijo Luis Jara, mientras que Ivette Vergara acotó: “Me quiero sumar y dejar claro que no estamos cambiando lo que dijimos ayer, que hubo una equivocación grave y se dañó a una menor. Pero es importante no agrandar las cosas, se pidieron disculpas, y eso se valora”.
Casi al final del despacho, apareció el
alcalde de Maipú, Christián Vittori -jefe de ambas, que trabajan en la
Oficina de la Diversidad de la municipalidad-, para comentar que "
se transgredió el derecho de una niña, pero también hay un acto de ellas de reconocimiento del error y eso es muy importante (... ) Esto nos deja un par de enseñanzas: las plazas son para jugar, para los niños. Y los adultos siempre tenemos la oportunidad de mejorar”.