27/10/2015 17:23:00
El pingüino se va por unos meses, pero siempre vuelve a la casa de su amigo Joao Pereira de Souza en Provetá, Brasil.
Un pingüino magallánico ha encontrado un dispar mejor amigo en una playa de Brasil. El Wall Street Journal narró la peculiar historia que comenzó hace cuatro años cuando el constructor retirado Joao Pereira de Souza vio al animal cubierto de petróleo en la playa junto a su casa en Provetá, Brasil. De Souza lo llevó a su casa, lo bañó, le dio pescado y no pudo deshacerse de él nunca más. El pingüino llamado Jingjing desparece durante cuatro meses, pero siempre regresa a la casa de su amigo brasileño para pasar la mayor parte del año. LEE TAMBIÉN:Esta inocente historia de amor entre un niño y su pingüino enternecerá tu viernes Esta especie de ave se encuentra en las costas e islas de la Patagonia de Argentina y Chile y suelen migrar al norte en el invierno. Se pueden ver hasta la altura de Río de Janeiro en Brasil. Pero no es común que se queden durante tanto tiempo en uno de estos lugares tropicales. Los pescadores locales se sorprenden al ver que Jingjing desaparece por unos días en el mar, pero siempre vuelve a su casa.
El pingüino se va por unos meses, pero siempre vuelve a la casa de su amigo Joao Pereira de Souza en Provetá, Brasil.
Un pingüino magallánico ha encontrado un dispar mejor amigo en una playa de Brasil. El Wall Street Journal narró la peculiar historia que comenzó hace cuatro años cuando el constructor retirado Joao Pereira de Souza vio al animal cubierto de petróleo en la playa junto a su casa en Provetá, Brasil. De Souza lo llevó a su casa, lo bañó, le dio pescado y no pudo deshacerse de él nunca más. El pingüino llamado Jingjing desparece durante cuatro meses, pero siempre regresa a la casa de su amigo brasileño para pasar la mayor parte del año. LEE TAMBIÉN:Esta inocente historia de amor entre un niño y su pingüino enternecerá tu viernes Esta especie de ave se encuentra en las costas e islas de la Patagonia de Argentina y Chile y suelen migrar al norte en el invierno. Se pueden ver hasta la altura de Río de Janeiro en Brasil. Pero no es común que se queden durante tanto tiempo en uno de estos lugares tropicales. Los pescadores locales se sorprenden al ver que Jingjing desaparece por unos días en el mar, pero siempre vuelve a su casa.