08/10/2014 22:19:02
El software malicioso afectó a aparatos presentes en América Latina, Europa y Asia. La Interpol adviritió a los países en peligro e inició una investigación para encontrar a los responsables.
La Interpol advirtió a varios países de América Latina, Europa y Asia por la presencia de un malware, o software malicioso, que permitó robar millones de dólares de cajeros automáticos. El software, también conocido como Tyupkin, fue detectado por Kaspersky Lab y permite a los cibercriminales sacar dinero sin la necesidad de usar una tarjeta. Los autores del hecho trabajan sólo los domingos y lunes por la noche. Introducen una combinación de dígitos en el teclado del cajero automático, hacen una llamada para recibir más instrucciones tras la que obtienen otra serie de números. Esta sencilla operación hace que el cajero automático empiece a expedir grandes cantidades de efectivo que las “mulas” retiran y se van. Los delincuentes trabajan en dos etapas. En primer lugar, consiguen el acceso físico a los cajeros automáticos en los que insertan un CD de arranque para instalar el malware Tyupkin. Después de reiniciar el sistema, el cajero automático infectado ya está bajo su control. Tras una infección exitosa, el malware se ejecuta en un bucle infinito, a la espera de un comando. Para hacer la estafa más difícil de detectar, Tyupkin es un malware que sólo acepta comandos en franjas concretas de las noches del domingo y del lunes. Durante esas horas, los atacantes son capaces de robar el efectivo de las máquinas infectadas. Un vídeo obtenido de las cámaras de seguridad de los cajeros automáticos infectados mostró la metodología utilizada para acceder a dinero en efectivo. En cada sesión del robo, se genera una única clave basada en números aleatorios, lo que asegura que nadie más pueda beneficiarse accidentalmente del fraude. El ejecutante recibe instrucciones por teléfono de otro miembro de la red que conoce el algoritmo y es capaz de generar una clave de sesión. Este segundo código de control evita que las mulas que recogen el dinero pudieran intentar hacer la operación por libre. Cuando la clave se introduce correctamente, el cajero muestra los detalles de la cantidad de dinero que está disponible en cada cartucho de efectivo, invitando al operador elegir el bloque que quiere vaciar, operación tras la cual la máquina entrega hasta 40 billetes en unos segundos. Las autoridades llamaron a las instituciones financieras del mundo a revisar la infraestructura de los cajeros, además de cambiar la contraseña de la BIOS, entre otros consejos.
El software malicioso afectó a aparatos presentes en América Latina, Europa y Asia. La Interpol adviritió a los países en peligro e inició una investigación para encontrar a los responsables.
La Interpol advirtió a varios países de América Latina, Europa y Asia por la presencia de un malware, o software malicioso, que permitó robar millones de dólares de cajeros automáticos. El software, también conocido como Tyupkin, fue detectado por Kaspersky Lab y permite a los cibercriminales sacar dinero sin la necesidad de usar una tarjeta. Los autores del hecho trabajan sólo los domingos y lunes por la noche. Introducen una combinación de dígitos en el teclado del cajero automático, hacen una llamada para recibir más instrucciones tras la que obtienen otra serie de números. Esta sencilla operación hace que el cajero automático empiece a expedir grandes cantidades de efectivo que las “mulas” retiran y se van. Los delincuentes trabajan en dos etapas. En primer lugar, consiguen el acceso físico a los cajeros automáticos en los que insertan un CD de arranque para instalar el malware Tyupkin. Después de reiniciar el sistema, el cajero automático infectado ya está bajo su control. Tras una infección exitosa, el malware se ejecuta en un bucle infinito, a la espera de un comando. Para hacer la estafa más difícil de detectar, Tyupkin es un malware que sólo acepta comandos en franjas concretas de las noches del domingo y del lunes. Durante esas horas, los atacantes son capaces de robar el efectivo de las máquinas infectadas. Un vídeo obtenido de las cámaras de seguridad de los cajeros automáticos infectados mostró la metodología utilizada para acceder a dinero en efectivo. En cada sesión del robo, se genera una única clave basada en números aleatorios, lo que asegura que nadie más pueda beneficiarse accidentalmente del fraude. El ejecutante recibe instrucciones por teléfono de otro miembro de la red que conoce el algoritmo y es capaz de generar una clave de sesión. Este segundo código de control evita que las mulas que recogen el dinero pudieran intentar hacer la operación por libre. Cuando la clave se introduce correctamente, el cajero muestra los detalles de la cantidad de dinero que está disponible en cada cartucho de efectivo, invitando al operador elegir el bloque que quiere vaciar, operación tras la cual la máquina entrega hasta 40 billetes en unos segundos. Las autoridades llamaron a las instituciones financieras del mundo a revisar la infraestructura de los cajeros, además de cambiar la contraseña de la BIOS, entre otros consejos.